La producción de vehículos en las fábricas españolas está completamente parada. El cierre obligado de las factorías como consecuencia de la pandemia del coronavirus ha dado lugar a un frenazo en el sector cuyo pronóstico de futuro es aterrador.
La asociación de fabricantes, Anfac, vaticina una caída de la producción en las cifras de marzo de entre el 50% y el 60%, cerca de 157.000 vehículos. Un desplome que contrasta con el cierre del pasado febrero, que registró un incremento del 2,9% respecto al mismo mes del año anterior.
Desde Anfac ya empiezan a pensar en un plan de choque para cuando se supere la crisis sanitaria, conocedores de que el sector estará prácticamente inerte tras la pandemia. Recuperar la confianza del usuario irá de la mano de la puesta en marcha de nuevo de las cadenas de montaje. El objetivo es consolidar el incremento productivo que se estaba notando desde inicios del 2020.
Las fábricas de vehículos que hay en España empezaron el año con 502.484 modelos producidos entre enero y febrero, el 1,4% más que en el 2019. En la consolidación de febrero, hay que destacar el buen ritmo del ensamblaje de turismos, que aumentaron el 5%, lo que contrasta con el descenso de los todoterreno, que bajaron el 41% (acumulan una caída del 42,5% este año). En vehículos comerciales e industriales, febrero se cerró con 51.592 vehículos ensamblados en las fábricas españolas, el 0,8% menos. Las exportaciones crecieron el 6,8%
