Las fusiones y la compraventa de empresas han permitido a la bolsa española tomarse un respiro en la pronunciada caída que arrastra desde que irrumpió la crisis financiera en los mercados. La fusión de Iberia y British Airways y la compra por parte de Gas Natural de más del 45% del capital de Unión Fenosa en manos de la constructora ACS, han permitido al mercado español cerrar el mes de julio con una mejora del 0,94%. Las pérdidas superaban el 8% y en junio el mercado cedió el 11,4%. No obstante, agosto se ha iniciado con nuevas pérdidas.

"Las dos operaciones son buenas noticias para los inversores. Iberia consigue sinergias y se ha notado en su cotización. En la operación eléctrica hay empresas que ganan más y otras que ganan menos", comenta Pablo Piquero, analista de Inversis.

En principio, la que más gana es Unión Fenosa, cuya cotización se ha movido al alza el 13% en una semana para acercarse al precio que paga Gas Natural. También se beneficia ACS, que ha ganado un más modesto 3,65%. El viernes --primer día de agosto-- cerró casi plana, pero consolida su posición, tanto de balance, si decide aplicar los ingresos que obtenga a reservas, como patrimonial, si utiliza esos recursos para mejorar su posición accionarial en Iberdrola. También sale beneficiada la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán. Mejora el 7,8%, si bien concluyó la semana con descensos. "Puede constituirse un grupo muy potente, si finalmente ACS consolida su posición", destaca Piquero.

Pese a los movimientos puntuales, la situación dista mucho de una recuperación bursátil en toda regla. "No es probable que las subidas bursátiles tengan continuidad en las próximas semanas, a pesar de que no creemos que el petróleo vuelva a desorbitarse", explica Antonio Zamora, director de análisis del Banco Urquijo. Zamora considera que el deterioro de la situación económica global sigue en marcha, así como los principales rasgos de la crisis crediticia.

TOCANDO FONDO Aunque la evolución del mercado puede verse influida por nuevas sorpresas desagradables, los expertos coinciden en que el fondo está cerca. "Pese a las apariencias, el ciclo es ya desinflacionario", comenta Joaquín Casadesús, director general de la gestora de Abante. "Puede que EEUU tenga que subir los tipos de interés, pero el Banco Central Europeo (BCE) se verá obligado a rebajarlos", explica.

Así, no será fácil que las empresas trasladen a los precios el exceso de costes por el alza de las materias primas. Un escenario de tipos bajos beneficia a las bolsas, pero no uno en el que los beneficios empresariales caen.