La Comisión Europea anunció hoy la imposición de una multa de 273 millones de euros a tres compañías cerveceras, Heineken, Grolsch y Bavaria, por mantener un pacto de precios en el mercado holandés. El grupo belga-brasileño InBev también participó en el "cartel", que funcionó al menos entre 1996 y 1999, pero fue eximido del pago de multa por haber facilitado a la Comisión "información decisiva" sobre las citadas prácticas. Según el ejecutivo comunitario, las cuatro cerveceras celebraron durante esos tres años numerosas reuniones, en las que coordinaron los precios de la cerveza así como los incrementos.
En rueda de prensa, la comisaria europea de Competencia, la holandesa Neelie Kroes, consideró "inaceptable" que los principales suministradores de cerveza fijen los precios de manera coordinada y se repartan el mercado. Kroes subrayó que los más altos ejecutivos de las compañías eran conscientes de la ilegalidad de su comportamiento y, a pesar de ello, continuaron con el acuerdo y lo mantuvieron encubierto.
Tras la apertura de una investigación a iniciativa propia y el descubrimiento de un "cartel" en el mercado belga de la cerveza, InBev se acogió al programa de clemencia de la Comisión e informó de su participación en acuerdos similares en otros países europeos. Bruselas llevó a cabo entonces visitas sorpresa en Francia, Luxemburgo, Holanda e Italia, que condujeron a sendas multas en los tres primeros países y al cierre de la investigación en Italia.
Respecto al "cartel" holandés, la Comisión explica que halló notas manuscritas sobre las reuniones secretas que confirmaron la información facilitada por InBev y demostraron la fijación coordinada de precios tanto para la cerveza adquirida en supermercados como para la consumida en bares y restaurantes. La cuantía de las multas se fijó teniendo en cuenta el tamaño del mercado afectado, la duración del acuerdo y la relevancia de las compañías implicados.
Multas millonarias
Bruselas reconoce que este procedimiento se alargó excesivamente -más de siete años después de llevar a cabo las inspecciones- y por ese motivo redujo las sanciones a cada una de las cerveceras en 100.000 euros. Así, Heineken tendrá que pagar 219,275 millones de euros, en tanto que la sanción a Grolsch será de 31,658 millones y la de Bavaria de 22,850 millones.
El ejecutivo de la UE recordó que cualquier persona o empresa que se considere afectada por este pacto de precios puede exigir una compensación por daños ante los tribunales nacionales, utilizando la decisión de la autoridad europea de competencia como prueba La comisaria insistió hoy en que no está dispuesta a tolerar este tipo de prácticas contra la competencia y las castigará con extrema dureza. Por eso, aconsejó a las compañías que "no se vean tentadas" a incurrir en acuerdos como éste y, si ya lo han hecho, que se acojan al programa de la Comisión y colaboren en su desactivación.
