«Por favor, no venga a la junta de accionistas·. Esa es la súplica de las cotizadas españolas a quienes el virus ha pillado en plenos preparativos para la celebración de sus asambleas. En pleno confinamiento no parece el momento más adecuado para congregar a cientos de personas en una misma sala, pero las empresas tienen el imperativo legal de reunir una vez al año a sus accionistas. El Gobierno les ha propuesto vía decreto la solución: retrasar las juntas hasta octubre o hacerlas de forma telemática.

Naturgy y Siemens Gamesa han sido las únicas, de momento, que han decidido aplazar sus asambleas sine die. La energética debía realizar su cumbre la semana pasada, el 17 de marzo, mientras que el grupo eólico tenía previsto hacerla esta, el jueves 26.

Pero la mayoría de compañías han apostado por la vía virtual. La más rápida en su anuncio fue Iberdrola, que un día después de que Pedro Sánchez anunciara las novedades del decreto hacía uso de él para anunciar que su junta sería 100% telemática, el día 2 de abril.

También el Banco Sabadell realizará su reunión el 26 de marzo en Alicante de forma telemática. Lo mismo que Bankia, convocada un día después (27), y la inmobiliaria Neinor (1 de abril). Caixabank apuesta por la celebración telemática en el caso de que no pueda cumplir con su propósito, hacerla presencial.

El banco que preside Jordi Gual comunicó la pasada semana su intención de mantener una reunión presencial el 3 de abril, pero a medida que se acerca la convocatoria parece difícil de llevar a cabo, por lo que lo normal sería que la entidad cambiara su plan.

Entonces, ya no haría falta alquilar el recinto en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia y tendría que buscar otro emplazamiento, previsiblemente su sede. S. L. / M. J. B.