Nokia, el gigante finlandés cuya cifra de negocio superó en el 2006 el presupuesto de su propio país (41.000 millones frente a 39.600), ha decidido lanzarse a la conquista del negocio de los proveedores de servicios y contenidos digitales a través de internet.

La compañía apuesta por la convergencia de móviles con internet y pretende competir en la red con enseñas como Google o Yahoo. Su gran apuesta para acortar la brecha que le separa de sus competidoras se llama Ovi. Se trata de un portal de internet que reúne todos los servicios que Nokia viene ya prestando. Ahora, la idea es incorporar Ovi a todos sus teléfonos móviles y convertirlo también en un programa para usarlo en el ordenador.