El temor a la crisis crediticia volvió a apoderarse de los mercados, especialmente después de que Northern Rock tuviera que acudir a la reserva de emergencia del Banco de Inglaterra. El Ibex 35 cayó un 1,54%, que ahogó el repunte de las tres últimas sesiones, para acumular pérdidas semanales del 0,08%. Las constructoras y la banca volvieron a ser el principal lastre del selectivo. Con numerosos datos de Estados Unidos, las ventas minoristas decepcionaron, pero una ligera mejora en otros índices contribuyó a paliar las pérdidas en Nueva York. Mientras, el euro se cambió a 1,38 dólares .

Tras la petición de auxilio del banco hipotecario Northern Rock al Banco de Inglaterra, algunos clientes formaron colas en sus oficinas para retirar sus depósitos. La desconfianza volvió a aflorar en los mercados, lo que se tradujo en incertidumbre en Wall Street, que moderó sus caídas y logró repuntar mínimamente al cierre de las bolsas europeas gracias a la subida del índice de confianza de Michigan. En cambio, con una subida del 0,3% en julio, las ventas minoristas en Estados Unidos fueron peores de lo previsto, al igual que la producción industrial, que solo se elevó un 0,2%. Las pérdidas de la jornada fueron más moderadas en el resto de parquets europeos que en el selectivo del mercado español. Londres se dejó el 1,17%; Milán, el 0,79%; Fráncfort, el 0,51% y París, el 0,45%.

En España, las mayores caídas fueron para la construcción y la banca, los sectores más castigados por la crisis crediticia. Sacyr Vallehermoso retrocedió un fuerte 5,1%, hasta los 24,55 euros por acción. ACS se dejó el 4,89%, FCC, el 4,84%, Ferrovial, el 3,3% y Acciona, el 2,54%. No le fueron mejor las cosas a las entidades bancarias. Bankinter cayó el 3,76%; el Popular, el 3,21%; Banesto, el 2,16% y el Sabadell, el 2,04%. Los dos grandes bancos del mercado sufrieron su particular calvario: el BBVA se dejó el 1,67% y el Santander el 1,01%. El resto de los grandes valores también encajaron recortes.