Alicia García Herrero es economista jefe de Asia-Pacífico en Natixis. También es profesora adjunta en la City University de Hong Kong y ha sido incorporada al grupo de 17 expertos que integran el nuevo Consejo Asesor de Asuntos Económicos, que preside la vicepresidenta Nadia Calviño. Desde Taiwán conversa con este diario sobre la experiencia asiática en la actual crisis económica y sanitaria.

¿Qué importancia tiene participar en este consejo asesor?

Lo he aceptado por el talante de la vicepresidenta Calviño y porque no he sentido ningún condicionante político. No veo mayor importancia para mí que la de poder compartir lo que yo veo en esta parte del mundo, donde he pasado 15 años. Lo que funciona y lo que no.

¿Cuál es ahora la principal lección asiática?

Ni en Taiwán ni en Hong Kong ha habido confinamiento interno. Sí con el resto del mundo. En países como Singapur, China o Tailandia ni siquiera podrían regresar los propios residentes o ciudadanos que estaban fuera. No llegué a entender la apertura tan rápida de las fronteras que hizo España, y Europa en general, cuando se empezó a controlar el ritmo de contagios. Sé que para un país turístico es muy difícil, pero Tailandia depende más del turismo que España y ha cerrado a cal y canto. Ellos entienden que cuando abran deberá ser algo definitivo y que abrir, cerrar, abrir, cerrar es contraproducente para transmitir confianza. Europa no se ha tomado en serio la alta probabilidad de un rebrote y de una nueva ola de contagios.

¿Dónde está el equilibrio?

Asia es una historia de contener, no de confinar, excepto en Hubei (el foco chino de la pandemia). El movimiento interno es total con reglas de contención, pero no fuera de las fronteras. España cerró brutalmente en el interior con la esperanza de poder abrir externamente en el verano, no nos engañemos. Pero no es una estrategia creíble, porque de fuera también pueden venir contagios.

Sorprende que una economista abogue por la restricción de la actividad económica.

España tuvo que reaccionar con firmeza, pero tal vez habría sido mejor diseñar después un plan de contención a medio plazo, asimilando que el covid es más permanente de lo que se pensó. Así, el impacto económico a medio plazo es menor, pues ello permite a las empresas planificar, establecer turnos… y se evitan rebrotes.

¿Cómo percibe la recuperación mundial de la economía?

La recuperación China va a ser más débil de lo esperado desde el punto de vista de las importaciones. El crecimiento de Europa no se va a salvar por Asia. Esta vez no va a ser como en el 2008, porque va a haber un repliegue hacia el interior en los países.

Eso afectará al turismo...

La desglobalización va a afectar en gran manera al turismo internacional y a España, en particular. Los desplazamientos serán solo los necesarios. España debería entender esto para mejorar su oferta de atracción de estudiantes, investigación, viajes sanitarios…

Todo esto no ayuda a la industria turística...

A lo mejor esto no es para los hoteles y los bares… ya lo siento, pero es que es preferible algo más permanente.

¿Está España capacitada para gestionar los proyectos que permitan aprovechar los 140.000 millones del fondo de reconstrucción de la Unión Europea?

España tiene capacidad de gestionar. Pero se requiere un pacto de Estado, pues esos fondos deberán gestionarse para un periodo y unos objetivos que trascienden la vida de un Gobierno. Es preciso que la gestión sea más mancomunada, para que no haya bandazos en las grandes estrategias. Hay que centrarse en reeducar a los trabajadores en nuevos empleos y sectores más productivos. H