El 44º presidente de EEUU, Barack Obama, estuvo ayer en Madrid para defender una de sus más firmes luchas durante su gobierno: un modelo energético más sostenible, en la celebración de la primera Cumbre de Innovación Tecnológica y Economía Circular. Y lo hizo, poco más de un año después de que su sucesor en el cargo, Donald Trump, tomase la decisión de dejar a EEUU fuera del Acuerdo de París, el primer pacto a nivel mundial para reducir las emisiones de CO2 y combatir así el cambio climático.

Al grito de «hello» en inglés y «hola» en español, el exmandatario estadounidense se subió al escenario de un auditorio lleno en el que le esperaba el que fue durante su gobierno uno de sus asesores más cercanos, el presidente de la Advanced Leadership Foundation, Juan Verde. No mencionó a Trump, pero sí que hizo referencia a su decisión de sacar a su país del acuerdo del clima. «Lo bueno es que a pesar de la falta de interés del actual gobierno de EEUU respecto a los esfuerzos que hicimos, las empresas han abrazado aquello que iniciamos en el 2010 y el resto de países han continuando respetando el Acuerdo de París», sostuvo.

Encuentro con Sánchez

Obama, que se reunió con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, pidió «continuar acelerando» la adaptación a las energías renovables pero sin entrar con ello en conflicto con el desarrollo económico. «La buena noticia es que somos testigos de que energías más limpias y sostenibles son competitivas respecto a los combustibles fósiles. La mala es que China, India, África, América Latina, todavía tienen países donde hay millones de personas que a pesar de tener un nivel de vida similar al de Madrid o Los Ángeles quieren su propio sistema de transporte y su sistema de aire acondicionado, y eso es totalmente razonable, que aspiren a tener lo mismo que los países más desarrollados», sostuvo.

«Una de las razones de convertirme en presidente de EEUU fue porque quería propiciar una agenda dirigida a un modelo energético más sostenible, nos queda un camino de 25 o 30 años para implantar una manera más inteligente de usar la energía, porque si no, podemos ver resultados catastróficos debido al calentamiento global», advirtió.

El Ministro de la Felicidad del Reino de Bután; los Nobel de Economía, Christopher Pissarides (2010) y Finn Kydland (2004), el presidente de Colombia, Iván Duque; el presidente extremeño Fernández Vara; Albert Rivera (Cs) o Pablo Casado (PP) fueron algunos de los participantes de un evento en el que estuvieron más de 1.500 personas y que cerró la ministra de Industria, Reyes Maroto.