La ola de frío en Europa amenaza con desestabilizar el mercado de verduras y hortalizas en España. Los precios se han disparado por encima del 100% en muchos productos y pueden poner en dificultades a los consumidores. Jaume Flores, presidente del gremio de frutas y hortalizas de Mercabarna asegura que el incremento de la demanda en el norte de Europa, tras la pérdida de cosechas allí, ha causado que la demanda se haya concentrado en España y que buena parte de la producción pueda irse al norte de Europa. "Solo queda producto en España, es una situación excepcional que nunca se había visto y será difícil que pueda volver a verla", explica Flores. "No faltará producto", asegura el presidente del gremio, pero reconoce que la situación no se estabilizará hasta que la producción en otros países pueda compensar oferta y demanda, presumiblemente en marzo. En las próximas dos semanas se verá si el alza de precios afecta también a las grandes cadenas de distribución españolas, por la renegociación de precios con sus proveedores, de mayor o menor vigencia según los casos.

En las últimas dos semanas los precios se han disparado. Ibeth Kathia Suárez y Éverson Fernández tienen una tienda de frutas y verduras en el barrio de Sagrada Familia y admiten que la situación se ha complicado para muchos de sus clientes. "Es imposible que la gente compre verdura a los precios actuales", dice Éverson. Su esposa Ibeth explica que "los clientes compran calabaza y zanahoria para hacer sus purés, en vez de calabacín, por ejemplo, para evitar la subida de precios". Ellos compran directamente a agricultores y suelen sumar un 20% a los precios de compra, más o menos, pero admiten que cuando los precios sufren una subida súbita como la actual reducen ese porcentaje al 8%, por ejemplo. Si la subida de precios es muy elevada, lo que suelen hacer es comprar otros productos que podrán vender de manera más fácil. Explican que la lechuga iceberg ha pasado de venderse de dos por un euro a 2,20 euros la unidad en dos semanas, por lo que deja de venderse. El brócoli hace dos semanas se compraba a 75 céntimos y ha pasado a 2,20 (precio de compra al agricultor) por lo que su precio de venta al público es todavía mayor (4,59 euros en el caso del comercio de Éverson e Ibeth, por ejemplo). En situaciones de precios disparados, esos productos encarecidos tienden a no llegar al mercado, ya que los distribuidores saben que su venta será más difícil y pueden llegar a quedarse con demasiados estocs sin vender. En las grandes cadenas, si los precios se disparan los productos afectados simplemente desaparecen, ante la dificultad de los proveedores de cumplir sus compromisos de precio previamente acordados.

GRANDES CADENAS

Las grandes cadenas de distribución en España no han detectado todavía grandes cambios, porque la mayoría de ellas pactan sus precios de manera anticipada de manera semanal y hasta mensual. En fuentes de El Corte Inglés confirman la subida de precios en el sector como consecuencia de la ola de frío, aunque minimizan los efectos en sus puntos de venta. En su opinión, las oscilaciones de la oferta se producen de manera recurrente pero su propio sistema de relaciones con proveedores con precios prepactados y su política comercial amortiguan las subidas de precios de venta al público. Sí que reconocen que se han dado en las últimas dos semanas menos oferta en productos de 4ª gama, las verduras listas para su consumo.

MERCADONA

En el caso de Mercadona, la ola de frío ha podido causar retrasos puntuales en la cadena de suministro a algunos puntos de venta, pero aseguran que la situación es lógica ante situaciones meteorológicas complicadas. En cualquier caso, la política de precios se mantiene por su relación a largo plazo con proveedores especialistas e interproveedores, gracias al elevado volumen de compra de la cadena. Las grandes compañías de distribución tienen múltiples suministradores con los que pactan precios previamente, por lo que los altibajos de oferta debidos a problemas meteorológicos tienen menos efecto en los precios finales que para los pequeños comercios independientes.

ENSALADAS ENVASADAS

Florette, especializada en el envasado de ensaladas frescas, asegura que la ola de frío no afectará a sus productos. "El suministro está totalmente garantizado debido a que tenemos cultivos repartidos por toda España", explica Fermín Aldaz, director comercial y de márketing de Florette. Los cultivos de la zona del Maresme no se han visto afectados. "Cultivamos de forma simultánea determinadas variedades en siempre al menos dos zonas diferentes. Esto nos permite que si algún cultivo ve comprometida su calidad debido principalmente a fenómenos o condiciones climatológicas excepcionales, podamos siempre garantizar el suministro de dicha variedad gracias a la segunda zona", explica Aldaz. Cataluña es con diferencia la zona con mayor consumo de ensaladas frescas envasadas de España, según Florette.