La Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobará hoy en Ginebra un "proyecto de normas sobre las responsabilidades de la empresas transnacionales y otras empresas comerciales en la esfera de los derechos humanos", a propuesta de un grupo de trabajo formado por cinco expertos.

Tras un periodo de cuatro años de elaboración, el documento llega ahora a la subcomisión de derechos humanos de la ONU, compuesta por 26 expertos nombrados por los estados miembros de Naciones Unidas, que han deliberado en público y ante los diplomáticos de los gobiernos. Se abre oficialmente así el camino para que el texto se convierta en una convención internacional, cuando sea remitido a la Asamblea General de la ONU.

El código ético establece una lista de obligaciones que deberán acatar las compañías multinacionales "y otras entidades económicas cuyas actividades tienen consecuencias para los derechos humanos", particularmente en torno a las cuestiones económicas, sociales y culturales.

El documento se centra en las empresas que operan en dos o más países, y propone como disposición general que difundan y apliquen un reglamento interno con los principios que aprobará la ONU tras recoger las opiniones de los gobiernos y las organizaciones no gubernamentales, con vistas a llegar a obtener el consenso más amplio posible.