La conferencia ministerial de la OPEP decidió hoy instar a los países miembros a "adherirse estrictamente" a sus cuotas de producción, lo que implica un compromiso para retirar del mercado la oferta excedentaria creada principalmente por el aumento del bombeo saudí en los últimos meses.

Además, Indonesia se ha retirado del sistema de cuotas de sus socios, y, como Irak tampoco participa en ese reparto, la cuota total del resto de los 11 países miembros queda establecida en 28,8 millones de barriles diarios (mbd), frente a los 29,67 mbd vigentes. Según explicó en rueda de prensa el presidente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), el argelino Chakib Jelil, la decisión equivale a una reducción de 520.000 barriles diarios respecto al bombeo real.

La retirada de Indonesia del sistema de cuotas responde al "deseo de ese país de suspender su participación en la OPEP", que el resto de socios aceptó hoy oficialmente, y mostró su esperanza de que en el futuro pueda regresar como miembro de pleno derecho. Indonesia había ya anunciado que abandonará al final de este año el grupo por haber dejado de ser un exportador neto de crudo.

La decisión de la 149 conferencia ministerial de la OPEP fue anunciada en la madrugada del miércoles tras arduas negociaciones en la sede vienesa de la organización, que duraron unas seis horas, después de que los precios del crudo cayeran por la expectativa de que el grupo no pactaría un recorte de sus suministros.

El barril del crudo Brent, la referencia en Europa, terminó ayer a 100,34 dólares en Londres, 3,10 dólares menos que al cierre del lunes, y después de haberse vendido puntualmente a 99,04 dólares, el nivel más bajo desde abril. En Nueva York, el barril del crudo de Texas (WTI), referente para Estados Unidos, retrocedió casi un 3 por ciento y cerró a 103,26 dólares.

Especialmente las declaraciones del ministro saudí de Petróleo, Ali I. Naimi, quien se mostró satisfecho con la caída del 30 por ciento de los precios del crudo desde julio, dieron pie a suponer que la OPEP no iba a rebajar su oferta. "Los países miembros se comprometen a respetar estrictamente" el tope establecido, señalaron los ministros en su declaración final, en una indirecta alusión de que Riad deberá retirar parte de los suministros que ha aumentado de forma unilateral desde abril pasado, con el fin de frenar la carrera alcista de los precios petroleros.

La cotización del barril experimentó en los primeros seis meses del año una fuerte escalada que alcanzó su máximo el 11 de julio, con récords históricos cercanos a los 148 dólares, antes de caer de forma precipitada hasta rondar los 100 dólares.

"El precio seguirá bajando a pesar de esta decisión (de la OPEP). Hay una sobreproducción, todo el mundo está de acuerdo con eso. Los inventarios son muy altos, tendremos un exceso de la oferta a final del año y que será todavía peor al principio del próximo", vaticinó el presidente de la OPEP.

Con esta declaración, Jelil insinuó que la organización deberá abordar la necesidad de pactar un eventual recorte de la cuota de producción el 17 de diciembre en Orán (Argelia), puesto que el Consejo de Ministro convocó oficialmente hoy una reunión extraordinaria para esa fecha.