Ni un revés como el que propinó el miércoles la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor´s (S&P) al rebajar el nivel de solvencia de las emisiones de deuda pública española ha puesto de acuerdo a Gobierno y oposición sobre la situación de la economía española. A diferencia de lo que sucedió la víspera, cuando S&P rebajó la calidad de la deuda de Portugal y el jefe del Ejecutivo y el líder de la oposición realizaron una declaración conjunta en defensa de los intereses del país ante los mercados, en España Gobierno y oposición se mantuvieron enfrentados. Así, varios miembros del Ejecutivo intentaron minimizar los acontecimientos a la par que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, proclamó un "mayor desprestigio" para España.