Dicen que será una auténtica revolución, que tendrá un impacto «más allá» de un cambio de tecnología e incluso el mismísimo Donald Trump saca las garras para declarar la guerra a China, Huawei mediante, y señala que «la carrera por el 5G está en marcha y Estados Unidos debe ganar». Pero, ¿qué es el 5G y por qué es tan importante?

El 5G son las siglas de quinta generación de conectividad de telefonía móvil, es decir, la sucesora del 4G, como esta lo fue del 3G. En la práctica de los usuarios significa más velocidad -de una rapidez de descarga de 150 megas por segundo a 20 gigas por segundo- y menos latencia -esto es el tiempo de respuesta desde que se da una orden a un dispositivo hasta que esta se ejecuta-. Pero, además permitirá pasar de conectar 10.000 dispositivos por kilómetro cuadrado a un millón: esto es el germen del Internet de las Cosas que los expertos aseguran que será una auténtica revolución al tener todo conectado entre sí. Entonces el poder estará en los datos que lo sabrán absolutamente todo.

Las aplicaciones

La nueva banda ultra rápida permitirá que el teléfono móvil funcione mejor que el ordenador de casa con wifi, pero también ver la televisión en la playa o visitar Tailandia desde el salón, con unas gafas de realidad virtual.

También la cirugía con robots, aunque el médico esté a miles de kilómetros de distancia, y las fábricas serán inteligentes, gracias a la automatización de los procesos, como también lo serán las redes de energía. En agricultura, permitirá un control en tiempo real de la humedad del sielo para optimizar los procesos de regadío. Y, en la carretera optimizará el tráfico para mejorar la movilidad. Por supuesto, con el 5G llegarán los coches autónomos y los coches conectados (para una conducción más segura). Y las relaciones entre los hombres y las máquinas serán algo habitual del día a día.

Todo estará conectado entre sí, los electrodomésticos, los coches, la energía, la oficina… y todo podrá ser controlado de forma remota. Lo mejor es que además no se trata de una ilusión del mañana, sino que estas aplicaciones ya se han testado en pruebas piloto en muchas ciudades españolas, entre ellas, Barcelona. De hecho, en la ciudad catalana se realizó la primera intervención quirúrgica en directo en remoto, desde el Mobile World Congress de Barcelona de este año: una operación de colon en el Clinic.

Y todo esto traerá beneficios que se podrán cuantificar. Según la Comisión Europea, los beneficios estimados al introducir el 5G en cuatro sectores productivos (automoción, salud, transporte y «utilities») aumentarían progresivamente hasta alcanzar los 62.500 millones de euros de impacto directo anual dentro de la Unión Europea en 2025.

Sectores beneficiados

Pero su aplicación se extiende a ocho sectores que serán los principales beneficiarios de esta nueva tecnología: industria, seguridad y defensa, automoción, salud y sanidad, media y entretenimiento, energía y «utilities», transporte y servicios financieros.

Pero todavía queda un tiempo para que todo eso ocurra. Según el director del Observatorio Nacional del 5G, Federico Ruiz, el 5G habrá despegado a principios del año 2021, todo lo anterior serán despliegues «limitados»: «Cuando lo notemos dependerá de la inversión en la red y de las frecuencias de despliegue».