La comisión de estándares de la banca del Parlamento británico criticó hoy por insuficiente el proyecto de ley de reforma bancaria del Gobierno, que contempla la división de las operaciones comerciales y de inversión.

Esa comisión, puesta en marcha a raíz del escándalo de la manipulación de la tasa interbancaria Libor por algunos bancos, ha cuestionado la legislación el mismo día que esta empieza a debatirse en la Cámara de los Comunes.

La ley propuesta por el Gobierno de David Cameron se basa en las recomendaciones hechas por otra comisión -la comisión independiente sobre la banca-, que propuso, entre otros puntos, la separación de la banca minorista y de inversión para evitar que las operaciones arriesgadas de los bancos llevaran a la quiebra de toda la institución.

Aunque el Ejecutivo ha aceptado los principios generales propuestos por este grupo, ha rechazado algunos puntos considerados clave al juzgar que existía el riesgo de conceder demasiado poder a los reguladores.

Así, la comisión de estándares de la banca, presidida por el diputado conservador Andrew Tyrie y en la que figura, como miembro de la Cámara de los Lores, el nuevo arzobispo de Canterbury, Justin Welby, ha criticado que el proyecto gubernamental no dé competencias a las autoridades para dividir por la fuerza a los bancos que no tomen ejecuten de forma efectiva esa separación.

El ministro de Economía, George Osborne, se ha comprometido a "electrificar" la metafórica valla que aislará las operaciones de las entidades, pero sin dar potestad legal al Banco de Inglaterra, el Tesoro y la Autoridad de Servicios Financieros (FSA) para responder si no se cumplen los requisitos.

Además, Osborne también ha descartado que un panel de expertos supervise periódicamente la aplicación de la reforma y del sistema de separación, una medida de la que es partidario el gobernador del banco central, Mervyn King.

"La ley está mejorada, pero el Gobierno ha rechazado una serie de recomendaciones importantes (...) con argumentos insustanciales", declaró Tyrie.

"Queda mucho por hacer para mejorar esta legislación", añadió el diputado.

La ley de reforma bancaria, que pretende evitar futuras crisis como la crediticia de 2008, empezará a estudiarse hoy en la Cámara de los Comunes, en vísperas de que Osborne presente el 20 de marzo el presupuesto general del Estado para el ejercicio 2013-14.