Los pensionistas que perciben una prestación no contributiva recibirán una ayuda anual de 350 euros para pagar el alquiler de sus viviendas. Así lo decidió ayer el Consejo de Ministros y lo plasmó en un real decreto cuyo contenido estará incluido en la ley de presupuestos generales del Estado del 2008. El Gobierno espera que la medida esté en vigor antes de que finalice el año.

La nueva norma establece los requisitos para el reconocimiento, tramitación y pago de esta ayuda que será abonada por el Estado. Los beneficiarios deberán acreditar que carecen de vivienda en propiedad, que son arrendadores de una casa en la fecha de solicitud de la ayuda, que no tienen relación de parentesco hasta el tercer grado con el propietario de la casa alquilada y demostrar que ésta es su residencia habitual.

Serán las comunidades autónomas las encargadas de resolver los expedientes de solicitud ya que el pensionista deberá dirigirse a ellas para la tramitación de la subvención. Las peticiones se resolverán en un plazo no superior a tres meses.

Es difícil concretar a cuántos pensionistas beneficiará la medida porque Trabajo desconoce el número de ellos que vive en alquiler. En España hay algo más de 470.000 perceptores de pensiones no contributivas de jubilación o invalidez. Pero esta medida tiene gran importancia para este colectivo, ya que los precios del alquiler se encarecieron una media del 4,4% en los últimos 12 meses, según los datos de septiembre del Instituto Nacional de Estadística.

DEMASIADO RESTRICTIVA El sindicato USO denunció ayer el excesivo carácter restrictivo de la medida. A su juicio, sería mejor aumentar las prestaciones que perciben estos pensionistas, unos 320 euros al mes. Mientras, la vicepresidenta del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, aseguró que esta actuación viene avalada por el Consejo Estatal de Personas Mayores y por el Consejo Nacional de Discapacidad y que servirá para mejorar "la calidad de vida de estos pensionistas". Según los cálculos del Gobierno, el 80% de los que perciben prestaciones no contributivas son mujeres.

La medida complementará las ayudas establecidas en el plan de vivienda vigente y en el recién aprobado para la emancipación y fomento del alquiler. Este último destina 210 euros al mes durante cuatro años a los jóvenes de entre 22 y 30 años cuyas rentas no superen los 22.000 euros anuales, y 600 euros para la fianza y la concesión de avales.