Las tiendas perciben en sus cuentas de resultados los efectos de la competencia de los gigantes de internet. La Confederación Española de Comercio (CEC) informó este lunes de que el pequeño comercio elevó las ventas solo el 0,5% en enero, en plenas rebajas, lejos de las expectativas de crecimiento de al menos el 3% que se esperaban. "Decepcionante" es la palabra utilizada por la patronal comercial, ya que las ventas en rebajas pueden suponer para los comerciantes hasta el 40% de las de todo el año. Sin embargo, el impacto de la competencia continua de internet ha sido desigual, aunque los datos de la CEC constatan que las grandes cadenas comerciales y las grandes superficies capearon mejor el temporal.

Según la CEC, la evolución de las ventas en el primer mes del año fue bastante desigual según modos de distribución, siendo el pequeño y mediano comercio el que salió peor parado frente a los crecimientos de grandes cadenas (+3,2%) y grandes superficies (+1,3%). Desde la CEC han explicado que los "discretos" datos de enero se han podido ver compensados con las ventas durante el mes de febrero, debido a que muchos comerciantes se han visto obligados a alargar las rebajas hasta finales de febrero e, incluso, hasta principios de marzo, con el objetivo de dar salida al estoc acumulado.

EFECTOS DEL BUEN TIEMPO

Además de la competencia de los gigantes de internet, encarnados especialmente por Amazon, la CEC apunta que el buen tiempo imperante en febrero ha podido también suponer un cierto lastre a las ventas de la ropa de invierno.

Desde la CEC han insistido en que el cambio de hábitos del consumidor, el comercio electrónico y la falta de regulación son las principales causas de esta pérdida de fuerza en rebajas. "La esencia y el objetivo principal de la campaña se ha perdido completamente, por lo que es indispensable que se reabra el debate sobre los periodos regulados de rebajas", ha subrayado la CEC. En cuanto al empleo, el primer mes del año deja un crecimiento del 1,2% interanual, debido a las contrataciones de personal eventual para cubrir la mayor actividad comercial durante la campaña de rebajas.

VARAPALO DE LA COMISIÓN EUROPEA

Frente a la posición de la CEC de regular de nuevo las rebajas, la Comisión Europea volvió este lunes a reclamar mayor liberalización del comercio en España y ayudas a la implantación a las grandes superficies. En concreto, la CE alerta del impacto limitado de la Unidad de Mercado en la economía española y de los riesgos que sobre la actividad empresarial supone la fragmentación, según se desprende de los datos del balance del Semestre Europeo 2019. Es curioso que la Comisión Europea ataque la falta de unidad de mercado en España y no cargue contra las limitaciones a escala europea y los proteccionismos imperantes entre países.

En el apartado de recomendaciones a España, la CE advierte de que el "carácter restrictivo y fragmentado de la regulación en España impide a las empresas aprovechar las economías de escala", que estrangula el crecimiento de las empresas y explica, entre otras cosas, "la brecha de productividad" frente a otros estados miembros y "una menor capacidad de absorción de conocimientos y tecnología". De esta forma, el Ejecutivo comunitario lamenta los "efectos limitados" que ha tenido la ley de garantía de la Unidad de Mercado, tras cinco años en vigor.

RESTRICCIONES

La Comisión Europa ha destacado que la situación es especialmente dramática en sectores como el comercio, ya que señala que las "restricciones en los servicios minoristas siguen siendo elevadas". "Las comunidades autónomas regulan el sector del comercio minorista y sus enfoques regulatorios son diferentes. De acuerdo al indicador del efecto restrictivo sobre el comercio minorista, España está entre los diez estados miembros más restrictivos en lo que respecta al establecimiento de locales comerciales", subraya el informe.

Bruselas considera que un impuesto específico al comercio minorista basado en el espacio de venta, que grava a los comerciantes de gran tamaño en algunas comunidades autónomas, afecta a la competitividad de los minoristas que operan en un espacio físico frente al comercio 'online', que está ganando terreno en España.

ANGED

La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), que cuenta entre sus asociados a firmas como El Corte Inglés, Leroy Merlin, Fnac o Worten, ha subrayado que es "importante" avanzar hacia un marco "normativo moderno, que responda a la realidad del consumidor actual". La patronal de la gran distribución considera que la Unidad de Mercado es una "palanca imprescindible" para conseguirlo. "Estamos a tiempo de corregir el rumbo y abrir un debate sensato sobre el futuro del sector. Entre todos, tenemos que avanzar hacia una mayor libertad comercial", ha subrayado. De esta forma, Anged insta a trabajar para conseguir un "marco regulatorio y medidas que permitan hacer más competitivos a los menos eficientes, pero sin perjudicar la competitividad de los que ya quieren adaptarse y competir mejor en el nuevo entorno digital".