El patrimonio de los planes de pensiones individuales cayó el 7,8% hasta septiembre. En cambio, el de los fondos en renta fija a corto plazo aumentó el 45,8% y el de renta variable disminuyó en el mismo periodo un 37%. La mejor rentabilidad correspondió a la renta fija garantizada, el 1,5%; seguida de la renta fija a corto plazo, 0,41%. La peor evolución se registró en la renta variable, que suma un retroceso del 6,9%.