El personal de tierra de Iberia ha iniciado el primer paso para convocar una huelga en todos los aeropuertos de España. El sindicato UGT ha enviado este lunes un burofax para notificar formalmente a la aerolínea su intención de registrar varias jornadas de paros entre finales de septiembre y principios de octubre, según ha declarado desde el sindicato, sin querer precisar más detalles sobre fechas concretas. La amenaza de huelga llega tras la decisión de la empresa de suspender las negociaciones del nuevo convenio para los trabajadores del 'handling', tras la convocatoria de nuevas huelgas por parte del personal de tierra en el aeropuerto de El Prat.

La convocatoria de huelga generalizada en el sector del handling español todavía no es firme. Para ello, UGT debe registrar formalmente en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) una petición de mediación entre los sindicatos y la empresa. Lo que, a la espera de la respuesta de Iberia ante el burofax, UGT prevé realizar a finales de esta semana. Una vez se solicita la mediación en el SIMA, paso obligatorio para llegar a registrar la huelga, esta debe celebrarse y terminar sin acuerdo entre las partes. Un proceso que, sumado a los 15 días de margen requeridos una vez fracasa la mediación, no permitiría a UGT registrar los paros hasta finales de septiembre o principios de octubre.

El anuncio de este posible convocatoria de huelga en todo el sector llega con una huelga, esta sí convocada en firme, por el comité de empresa del personal de tierra de Iberia en el aeropuerto de El Prat de Barcelona. Esta se celebrará, si no hay acuerdo de por medio, los próximos días 21, 22, 23 y 24 de septiembre. Hasta el momento no hay fecha prevista para una mediación previa, auspiciada por el Departamento de Trabajo, para intentar desactivar dichos paros.

El aeropuerto de El Prat ha sido el epicentro del conflicto laboral que mantiene Iberia con sus trabajadores del personal de tierra. Hasta seis jornadas de huelgas han realizado los trabajadores del 'handling' de dicho aeropuerto, en protesta por las condiciones de alta temporalidad en las que trabaja parte de la plantilla. Los empleados de Madrid se sumaron a la huelga en la última convocatoria, del pasado 30 y 31 de agosto, y el conflicto se ha extendido a otros aeropuertos como el de Bilbao o Málaga.