La teoría de que la guerra en Irak se alargará más de lo que en un principio vaticinaron los aliados dio ayer argumentos a los inversores para retirarse de los mercados. Las bolsas registraron nuevos retrocesos, mientras que el precio del petróleo se movió abruptamente al alza y el dólar perdió posiciones frente al euro.

El Ibex 35 de la bolsa española perdió el 2%, hasta los 6.022 puntos, y en una proporción similar descendieron los parquets de París, Londres y Fráncfort, mientras que en Wall Street las pérdidas fueron algo más moderadas.

Los mercados prestaron atención a los comentarios de militares de EEUU --recogidos en diarios como el Washington Post -- en los que se subraya que, además de que la campaña durará más de lo previsto, requiere de más tropas y equipamiento para que pueda ser un éxito. Tampoco la rueda de prensa ofrecida por Bush y Blair despejó la duda.

"Los inversores intentan calibrar la duración de la guerra, y eso es más complicado al principio de la contienda que a medida que se prolongue el conflicto", comentó José Luis Alonso, director de análisis de Bolsamanía, para quien es posible que, cuando discurran los días, la volatilidad del mercado disminuirá y los índices tomarán una tendencia más clara.

De momento, no es así para el petróleo. El precio del barril de Brent aumentó casi el 5% y se situó por encima de los 26,5 dólares. A la crisis de Irak se une el conflicto civil en Nigeria.