El barril de Brent, de referencia en Europa, batió ayer un nuevo récord en el mercado de futuros de Londres al cotizar a 127,89 dólares el barril, impulsado por el temor de los inversores a una escasez de suministro. Al cierre de la sesión la cotización replegó hasta los 127,27 dólares.

También el barril de crudo Texas, de referencia en Estados Unidos, alcanzó ayer máximos históricos en el mercado neoyorquino al superar la barrera de los 129 dólares. El nuevo repunte del crudo influyó ayer en la caída generalizada de las bolsas. La tendencia alcista del petróleo se debe, sobre todo, al temor de los inversores a que el suministro no pueda hacer frente a la demanda, sobre todo, de China que, que tras el terremoto y en plena cuenta atrás para los Juegos Olímpicos, ha aumentado sus necesidades energéticas.

EL DOLAR También sigue afectando la debilidad del dólar frente a otras divisas, que atrae a los inversores a invertir en las materias primas que, como el petróleo, se comercian en la moneda estadounidense. En el mercado de divisas, el dólar se debilitó ayer frente al euro y el cambio quedó fijado en 1,5673 dólares por cada euro.

Pese a las peticiones internacionales, entre ellas de EEUU, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha descartado aumentar su producción antes de la reunión del cartel en Viena el 9 de septiembre. Los miembros de la OPEP opinan que el alza de precios se debe al debilitamiento del dólar y a temas políticos. La semana pasada, Goldman Sachs, el banco de inversión más activo en los mercados energéticos, elevó su previsión a 141 dólares por barril en el segundo semestre.