El petróleo parece carecer de techo. El crudo West Texas, de referencia en EEUU, llegó ayer al récord de 108,21 dólares, en una sesión en la que encadenó varios máximos. De igual modo, el barril de Brent alcanzó en Londres los 104,35 dólares por barril por primera vez en su historia.

EEUU sufre especialmente este encarecimiento. La gasolina supera los tres dólares por galón, cuando allí estaban acostumbrados a unos 26 centavos por litro. Europa se beneficia del fortalecimiento del euro, que amortigua los efectos del alza del barril.

Mientras, las energéticas españolas vivieron una jornada de euforia. Los expertos auguran procesos de concentración en el sector una vez pasadas las generales.