La aerolínea Iberia y el sindicato Sepla sellaron ayer el IX Convenio Colectivo de pilotos para los próximos tres años. El 71% de los afiliados de la organización de trabajadores dio el visto bueno a un texto que les asegura incrementos salariales del 2,5% para este 2018 y del 2% para el 2019, además del compromiso de la compañía de incrementar la actividad en los próximos años, lo que implica mayores posibilidades de promoción o una cláusula de dos pilotos mínimo por avión. «Estamos convencidos de que, los pilotos de Iberia somos un colectivo cada vez más valorado, si cabe, en todos los estamentos del Grupo IAG», reza una circular interna del sindicato, felicitándose por el acuerdo que se ha conseguido.

La fama del buen sueldo de los pilotos es la envidia de muchas otras profesiones, siendo este colectivo uno de los mejores remunerados históricamente. No obstante, los sueldos actuales de los comandantes y copilotos de aeronaves no son tan abultados como en épocas anteriores. De hecho, el salario base de un camarero, siendo la hostelería la actividad con la menor remuneración según la encuesta de estructura salarial del 2017, tiene un salario base más alto que el de un piloto de Iberia.

Las tablas salariales del texto sellado entre empresa y trabajadores contienen un salario base de 1.014,31 euros mensuales tanto para pilotos como para copilotos. Una cifra que, no obstante, se dispara al añadir los múltiples pluses que trazan un auténtico jeroglífico en la nómina. «Sinceramente, no soy capaz de entender mi nómina», confiesa un comandante de Iberia.

A esos 1.014,31 euros los trabajadores deben sumar un complemento garantizado para las primeras 70 horas de vuelo que varía entre los 3.868,89 de un Delta 1, la categoría más alta, o los 92,29 euros de un piloto novato. Si superan dicho número de horas de vuelo, algo habitual, el precio de la hora varía también entre 1,2 y 47,23 euros. La cifra final la complementan pluses de dietas, productividad o desplazamiento, variando este último entre el personal de trayectos largos y el de trayectos cortos.

Diversas fuentes del sector consultadas son reacias a dar una cifra de sueldo medio, ya que el baile de complementos hace de cada caso un mundo. No obstante, a un piloto se le podría atribuir unos ingresos brutos de 12.500 euros, repartidos en quince pagas.

La fiscalidad es un punto relevante en cuanto al dinero que finalmente se llevan al bolsillo los pilotos y es que Ryanair paga menos a sus comandantes que Iberia, aunque en muchos casos estos acaban ganando más. Un piloto de esta aerolínea low cost gana unos 140.000 euros brutos anuales (10.000 euros en 14 pagas), según personal de la empresa, y «hasta 200.000 euros por año», según la propia firma.

La pujante Norwegian pactó el pasado 12 de julio un nuevo convenio que, entre salario base y pluses de vuelo, elevaría los ingresos entre los 9.080 y los 9.896 euros brutos al mes. Mientras que los copilotos de la firma noruega se embolsan entre 3.432 y 4.593 euros.

Por su parte, Vueling, al igual que la británica Easyjet, se encuentra actualmente cerrando los últimos flecos del que será su tercer convenio para actualizar los sueldos que están entre los más bajos del sector. En la low cost del grupo IAG, un piloto novel cobra 5.348 euros al mes y el más veterano 9.230 euros, mientras que los copilotos se llevan entre 1.093 y 4.292 euros.