Angel Ron dio un paso adelante para defender el sector financiero. En medio de las críticas, el presidente del Banco Popular no se contentó, como sus competidores, con defender que las entidades no han cortado el grifo de la financiación, sino que afirmó que "sería bueno" que el crédito no creciese para sentar las bases de un mejor crecimiento de la economía. Las familias y empresas, dijo, tienen un endeudamiento insostenible para la época de recesión y de mercados financieros internacionales cerrados (España capta más del 10% de su financiación en el exterior). Por ello, deben emprender un proceso de desapalancamiento "ordenado", aún a costa de que queden menos recursos para consumo. El banco ganó 1.346 millones en el 2008, el 16,8% menos. El beneficio podría haber subido, pero ha "renunciado a adornar" la cuenta.