El precio del barril de petróleo Brent, la referencia en Europa, ha superado la barrera de los 60 dólares, hasta la cota de los 63 dólares, pero sigue costando en torno a la mitad que hace un año. En concreto, durante mayo del año pasado, la cotización llegó a rozar los 130 dólares.

En las últimas semanas, a medida que surgían posibles indicios de recuperación, subió el precio del barril de un nivel de 40 a los 60 dólares actuales. Eso se ha traducido en un encarecimiento de los carburantes, hasta el extremo de que el litro de gasolina sin plomo de 95 octanos supera ya el euro por litro de media. El gasóleo se sitúa en una media de unos 87 céntimos, según el último Boletín Petrolero de la UE.

La actual evolución hizo que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidiera ayer en Viena no alterar su producción. "El mercado está sobreabastecido, pero estamos viendo la luz al final del túnel. No queremos enviar una señal errónea para la recuperación", explicó el secretario general de la OPEP, Abdalá El-Badri.