El precio del petróleo llegó a descender ayer más de un 10%, la caída más abrupta que se produce en el mercado en el último año. El precio del barril de Brent cerró el lunes en 29,48 dólares y en los primeros minutos de negociación en el International Petroleum Exchange de Londres llegó hasta los 26,40 dólares. Posteriormente, la cotización ascendió hasta alcanzar niveles por encima de los 27,50 dólares, aún así, muy por debajo de los 30 dólares, cifra por encima de la cual se ha estado pagando el crudo en el último mes y medio.

La convicción de los operadores de que habrá una intervención militar en Irak y que ésta será rápida es la razón principal que justifica el descenso de los precios del crudo. Una situación que tiene precedentes en la primera guerra del Golfo. En octubre de 1990, el petróleo Texas, referencia que se utiliza en Estados Unidos, alcanzó los 41,15 dólares por barril, inmediatamente después de la invasión de Kuwait por parte de Irak. El 17 de enero, coincidiendo con los primeros ataques de las tropas norteamericanas, el valor del petróleo cayó más de un tercio.

DISPARO DE SALIDA

"Algunos operadores esperan que se produzca la misma situación que en 1991, y entienden que si esperan al disparo de salida igual ya es tarde para vender", comentó ayer Jim Steel, director de materias primas de Refco en Nueva York.

Para muchos analistas, el optimismo sobre los precios sólo podrá mantenerse a corto plazo. "Si la guerra dura más de dos o tres semanas, las cotizaciones volverán a subir", auguró Manoucher Takin, experto del Centre for Global Energy Studies de Londres. Esto hace suponer que los precios registrarán una alta inestabilidad en los próximos días.

La volatilidad, igualmente, se apoderó ayer de los índices bursátiles, que tras la subida del lunes, mostraron ayer una gran irregularidad. En los mercados continentales, París y Milán tuvieron recortes de más del 1%, mientras que Londres, Fráncfort, así como los índices de la bolsa española, anotaron ganancias. El Ibex 35 subió el 0,4%, hasta los 6.089 puntos. Las subidas alternaron también con las bajadas en Wall Street.

Por su parte, el euro bajó en el mercado de divisas de Fráncfort y se pagó al cierre a 1,0630 dólares, frente a los 1,0644 dólares de esta mañana. El Banco Central Europeo fijó el cambio oficial de la moneda única europea en los 1,0586 dólares.