El Indice de Precios al Consumo (IPC) se mantuvo estable en Extremadura en septiembre, en tanto que la media nacional bajó un 0,2%, y la tasa interanual se situó en el 2,5%, sobre lo que Junta destacó la importancia del poder adquisitivo regional y UGT y CCOO señalaron que la estabilidad se debe a la bajada de los precios energéticos. El IPC ha bajado en 13 comunidades y solo ha subido en una.

Por provincias, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística, los precios se mantuvieron estables en Cáceres, mientras que bajaron un 0,1% en Badajoz. En términos interanuales la provincia con mayores subidas fue Cáceres (2,7%), mientras que la inflación fue menor en Badajoz (2,4%) . Por grupos de productos y servicios, el más inflacionista en septiembre en Extremadura fue vestido y calzado (3,5%).

La inflación acumulada durante los nueve primeros meses del año fue más alta en vivienda (5,8%) y transporte (3,5%) y se produjeron descensos en vestido y calzado (-8,5%), ocio y cultura y comunicaciones (-0,9%).

La inflación interanual fue más alta en vivienda (6,9%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (4,0%), mientras que se mantuvo estable en transporte y descendió en comunicaciones (-1,2%) y ocio y cultura (-0,9%).

Ante esto, la Junta afirmó que "la interanual por debajo de la media nacional mantiene a Extremadura como una de las comunidades autónomas de mayor poder adquisitivo. Con estos datos, según la Junta, la tasa interanual de inflación, que mide el incremento de los precios en los últimos doce meses, se sitúa en el 2,5% en Extremadura, cuatro décimas bajo la media española, del 2,9%.

Por su parte, UGT consideró positiva la contención del IPC en septiembre en Extremadura, aunque apeló a la cautela, ya que esa contención se produce por el retroceso de los precios del petróleo y "no se observan circunstancias añadidas favorables que permitan valorar con optimismo la evolución de los precios en los próximos meses".

A su vez, CCOO consideró que el mantenimiento de los precios en la región en septiembre se debe a un respiro circunstancial ligado al descenso del valor de los productos enérgicos y advirtió de que no se están dando soluciones para resolver los problemas estructurales que presionan al alza a los precios.