El índice de precios de consumo (IPC) moderó su caída en el mes de mayo al bajar el 1% interanual, una décima menos que el mes anterior, debido principalmente al aumento de los precios de la electricidad frente al descenso del año pasado, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con la bajada del 1%, los precios de consumo encadenan cinco meses en negativo después de que en diciembre cerraran el año de forma estable, con el cero por ciento. La última tasa en positivo se remonta a julio de 2015, con el 0,1% de subida.
En Catalunya el IPC aumentó un 0,6% en mayo respecto al mes anterior, lo que sitúa la inflación acumulada en los últimos doce meses en el -0,7%, y desde que se inició el año en el -0,2%.
En el conjunto de España, además de la electricidad, también ha influido el ocio y la cultura, que aumentó su tasa siete décimas, hasta el -1,9%, debido, en su mayoría, a que este mes los precios del viaje organizado bajaron menos de lo que lo hicieron en mayo del año pasado.
La vivienda tuvo una variación negativa del 6,5% motivada, básicamente, por el citado aumento de los precios de la electricidad y el transporte también se situó en terreno negativo, con el 4,9%, consecuencia de que en mayo los precios de carburantes y lubricantes subieron más que el año pasado.
Frente a estos descensos, el grupo de comunicaciones se situó en positivo en el 1,8 % a causa de la estabilidad de los precios de los servicios telefónicos frente a la subida de 2015. En la misma línea, los alimentos y bebidas no alcohólicas tuvieron una variación positiva del 1,7% por la subida de los precios de las frutas frescas, mayor que la de mayo de 2015.
