El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha vuelto a salir en defensa de las compañías gasistas frente a los recortes en la retribución que propone la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). El representante de las empresas tildó la propuesta de «barbaridad» y reclamó «predictibilidad y estabilidad regulatoria», durante la jornada El papel del gas en la descarbonización del sistema energético de la UE, organizada por la Fundación Naturgy.
La CNMC propuso en julio un fuerte recorte a las actividades reguladas de las empresas energéticas que abrió la guerra entre el sector y el regulador. El organismo que presidente José María Marín Quemada planteó una rebaja promedio del 17,8% en la distribución del gas y del 21,8% en el transporte gasista para el quinquenio 2021-2026, y un recorte del 7% en la distribución eléctrica y del 8,2% en el transporte de electricidad para el 2020-2025.
«Hay que tener predictibilidad y seguridad regulatoria para evitar vaivenes en los mercados provocados tan solo por el anuncio de una decisión que aún no es firme», dijo Antonio Garamendi, en alusión al recorte propuesto por la CNMC que provocó la caída en bolsa de las principales empresas afectadas.
El presidente de los empresarios hizo una defensa a ultranza del papel del gas en el mix energético español al reconocer que «lo primero es poner en valor el papel del gas». «En la CEOE estamos por y para el gas», siguió Garamendi, quien aseguró que el sector energético se castiga «muchas veces» pero , a su juicio, tiene «un papel fundamental en nuestro país». Así, hizo hincapié en el papel crucial que tiene esta tecnología como energía de respaldo con las renovables. «El día que no haya viento, sol, mientras no se puedan almacenar esas energías necesitamos energía de base, y la mejor probablemente es el gas», advirtió el presidente de la CEOE que calificó el gas como «pieza clave en la operación del sistema eléctrico».
