El Grupo Socialista en la Asamblea mantendrá reuniones periódicas con los representantes de las Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAS) de Extremadura para debatir sobre el desarrollo de la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) y las consecuencias y los problemas que su aplicación ocasionará a la región.
Las organizaciones agrarias coinciden en que la nueva PAC es "perjudicial para los profesionales de la agricultura", ya que "con el desacoplamiento se favorece a aquellos que no producen absolutamente nada, puesto que se podrán recibir subvenciones sin realizar ningún tipo de actividad agraria". Así, con ello "se incentiva el abandono del campo en lugar de potenciar su producción", tal y como expresó ayer Lorenzo Ramos, secretario de la organización agraria en Extremadura UPA-UCE.
ANTES DEL 2008
Según el presidente de Asaja, Angel García Blanco, la puesta en marcha de la PAC se llevará a cabo "irreversiblemente" antes del 2008 y se provocará "la transformación económica y social del campo", lo que en su opinión redundará en la desaparición del ámbito rural y la despoblación de los pueblos extremeños. Por ello, se debe proceder a "una labor de concienciación social, para demostrar que los productos de Extremadura son de mayor calidad que los de más bajo precio procedentes de terceros países", añadió.
Así, las reuniones periódicas entre los representantes agrarios y los políticos son una de las medidas adoptadas por ambas partes durante el encuentro mantenido ayer en Mérida y en la que informaron sobre la "preocupación unánime" que genera la aplicación de la PAC, y que "si la reforma es algo beneficioso como afirma el Gobierno de la nación no es lógico que se demore su puesta en marcha tanto tiempo".
