La crisis pasa factura hasta a la lucha contra el fraude fiscal. La Agencia Tributaria recaudó por este concepto 8.054 millones el año pasado, lo que representa un incremento del 8,3% frente al ejercicio anterior. El aumentó es casi la mitad de vigoroso que los registrados en el 2007 (16%) y el 2006 (15,9%).

La recaudación directa ascendió a 6.518 millones, el 9,5% más, frente a los incrementos del 12,1% del 2007 y del 15,1% del 2006. Los ingresos por casos en que se descubre que el contribuyente trata de que le devuelvan más de lo que le corresponde siguieron creciendo (36,6% más, hasta los 1.693 millones), pero no compensaron el estancamiento de los derivados de las actuaciones de Hacienda (4.825 millones, 2,3% más).

El frenazo fue aún mayor en la recaudación inducida, es decir, aquellas declaraciones presentadas fuera de plazo, que la Agencia Tributaria achaca al efecto disuasorio de sus actuaciones de lucha contra el fraude. Los ingresos ascendieron a 1.536 millones de euros, apenas el 3,8% más que en el ejercicio anterior, muy por debajo de los incrementos del 2007 (34,9%), el 2006 (20,2%) y el 2005 (20,3%).

EXPEDIENTES En cuanto a los delitos fiscales, Hacienda trasladó 679 expedientes a la Fiscalía, el 6,48% menos, por un importe de 500,28 millones. La mayoría de las actuaciones (425, 219,21 millones) correspondieron a tramas para defraudar en el pago del IVA. En total, Hacienda ingresó 173.453 millones, el 13,6% menos que en el 2008 y el 85% menos de lo presupuestado, por efecto de la crisis y las medidas públicas.