La economía francesa creció únicamente un 0,1% en el segundo trimestre de este año, después del 0,4% alcanzado en los tres primeros meses del año, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística. Este resultado hace cada vez más difícil el objetivo del Gobierno de un crecimiento del 2% anual. En Portugal, también se ralentizó la economía en el mes de julio, al caer un 0,5% respecto del mismo mes del 2004.