El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, alertó ayer de que el desequilibrio en el crecimiento de la economía española "se está agudizando", como muestra el empeoramiento marcado del déficit por cuenta corriente.

El desequilibrio en las transacciones con el extranjero, debido básicamente al déficit comercial, se está haciendo más hondo y es comparable en términos porcentuales al de EEUU, que recibe una y otra vez las quejas del FMI.

Para lograr un crecimiento "más sostenido", Rato recomendó al Gobierno español que ahorre, ahora que el país atraviesa por la parte expansiva del ciclo económico, acometa la reforma laboral, mantenga la moderación salarial y eleve la competitividad.

La otra preocupación manifestada por el Fondo en su informe respecto a España es la escalada del precio de la vivienda. Rato afirmó que la cuestión clave es a qué ritmo se van a elevar los tipos de interés a largo plazo, cuyo bajo nivel ha estimulado el boom inmobiliario.

A pesar de estas advertencias, el FMI ha mejorado sus previsiones para España, cuya economía se expandirá este año un 3,2% en términos reales (descontada la inflación) y un 3% en el 2006.