La esperanza volvió ayer a la bolsa española. El Ibex 35 mantuvo el tipo durante casi toda la jornada ya que estuvo en terreno positivo hasta poco después de las 5 de la tarde. Aunque el índice llegó a subir el 1,9%, acabó la sesión con casi 30 puntos menos, que equivalen a un descenso del 0,28%. El culpable fue, nuevamente, Wall Street, que a partir de las 5 de la tarde se acercaba peligrosamente a las pérdidas por la falta de confianza de los inversores pese al anuncio de nuevas aportaciones millonarias de liquidez por parte de las autoridades monetarias mundiales y del Gobierno de EEUU.

El efecto de lluvia sobre mojado arrastró al Ibex 35 a un nuevo mínimo anual de 10.631,60 puntos, lo que supone un desplome desde enero del 29,97%. En comparación con el resto de Europa, la bolsa española salió bien parada porque los descensos en Londres, París y Milán oscilaron entre el 0,58% y el 1%. La excepción fue el mercado de Fráncfort, que logró una leve mejora a contracorriente del 0,04%.

El volumen de negocio de la jornada en España fue de 5.384 millones de euros, de los que 913 millones correspondieron al Santander, 806 a Telefónica y 577 al BBVA. De los grandes valores que forman parte del Ibex solo subió Telefónica (0,71%). Iberdrola perdió el 1,29%; BBVA, el 1,06%; Santander, el 0,4%; y Repsol, el 0,37%. En el conjunto de valores, OHL encabezó las pérdidas del Ibex con un descenso del 10,27%, mientras que Gas Natural bajó el 5,39%; Iberia, el 3,48%; Abengoa, el 3,04%; y Enagás, el 3%.

Los bancos medianos se salvaron de la quema de última hora y Bankinter encabezó las ganancias del Ibex con una subida del 6,03%, mientras que Ferrovial rentabilizó por fin la venta de un aeropuerto londinense y ganó el 5,14%, en tanto que FCC subió el 4,41% y Banco Popular, el 2,74%.

En el mercado continuo destacó la caída de las acciones de Vocento (13,27%), mientras que Inmobiliaria Colonial cedió el 12,50%.