Malos tiempos para consumir energía. El recibo de la luz registrará a partir de enero una subida de más del 5%, a años luz del IPC (tasa anual del 0,2% en noviembre). Si nada o nadie lo remedia, el Gobierno decidirá un alza "máxima" del 2% en la parte regulada, a la que deberá añadirse la correspondiente al resultado de la subasta del mercado mayorista de mañana jueves, el coste de la energía, que en principio se rige por la libre concurrencia. Los expertos estiman que eso puede suponer un aumento de 5% más pero incluso se baraja hasta el 8%, un auténtico tarifazo.

Tras negarlo con insistencia, el ministro de Industria, José Manuel Soria, admitió ayer que el Gobierno aprobará un aumento de los peajes (la parte regulada del recibo, que supone alrededor del 60% del total) de un máximo del 2%. Soria, tras participar en un acto con motivo del 85 aniversario de Paradores, afirmó que el alza se debe a "la amortización del principal y los intereses del desfase entre ingresos y costes del sistema" en el 2013, que se situará en unos 3.600 millones. La patronal eléctrica Unesa estima que la suma puede llegar a 4.000 millones.

En todo caso, era una cantidad que el Gobierno se había comprometido a asumir a través de los Presupuestos después de que el resto lo pagaran los consumidores (con subidas de tarifas) y las compañías eléctricas (con nuevos impuestos y recortes en la remuneración de actividades reguladas).

TITULIZACION DEL DEFICIT Pero, a última hora, se desdijo al desbocarse el déficit público, lo que provocó el desplome bursátil de las compañías. Finalmente, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, acordó con las eléctricas avalar la colocación del déficit del 2013 en el mercado, al igual que se hizo con los otros 26.000 millones de euros hasta el año pasado. En Unesa la percepción no es tan clara: "solo se pactó crear un grupo de trabajo para avalar la titulización del déficit", afirmaron ayer.

Además recuerdan que Industria aseguró que, gracias a las reformas acometidas, este año ya no habría déficit de tarifa. Y al final lo habrá. Hasta septiembre ascendía a unos 4.300 millones, pero sin ajustar el resultado a las medidas acordadas por el Gobierno, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

PRECIOS DISPARADOS Como ha sucedido con anterioridad, esa colocación en los mercados libera de ese pasivo a las compañías y lo traslada de forma diferida al recibo de los usuarios, que pagan a plazos los intereses y el capital a los titulares de la deuda, que suelen ser bancos y otras entidades financieras. Desde que el Gobierno cambió de criterio con la financiación del déficit sobrevenido, los precios en el mercado mayorista, que se usan trimestralmente en el recibo para fijar el coste de la energía, se han disparado. La tendencia es un alza de alrededor del 13%, lo que en la factura del usuario final supondría alrededor del 5%, aunque puede ser más.

Esta evolución llevó al ministerio de Industria a solicitar una investigación a la CNMC. El organismo regulador admitió poco después que analizaba los movimientos "inusuales" en los precios mayoristas de la electricidad. A su vez abrió una fase de información previa sobre "las oscilaciones de precios registradas en general, y específicamente entre el 2 y 9 de diciembre". Durante ese periodo destaca el despegue de los precios mayoristas el domingo 8, donde a pesar de la baja demanda por ser un festivo y una moderada generación con ciclos combinados (gas) el precio medio superó los 90 megavatios (MW) hora sin que apenas actuara la energía eólica. Según fuentes del sector, esta evolución responde sobretodo a "factores relacionados con la estrategia de los agentes que también está influyendo en que las subidas sean más acusadas".

MAÑANA, SUBASTA El cambio en la climatología, que vaticina más demanda por el aumento del frío, hace prever un precio mayorista elevado de cara a la subasta de mañana, según los expertos. Y en la parte regulada será difícil evitar el aumento. "Las reglas de juego están claras. Aplicando las normas actuales en vigor, la subida será importante. No aplicarlas es lo que ha provocado la situación actual del sistema", explican desde los colegios de ingenieros.

En todo caso, dada la sensibilidad política que despiertan las tarifas eléctricas, que a pesar de estar liberlizado el mercado utilizan más de 20 millones de usuarios, no se descarta ninguna maniobra de última hora por parte del Gobierno. Pronto se verá.