El dinero que envían a sus países de origen los inmigrantes que trabajan en España alcanzó los 2.824 millones de euros entre los meses de enero y junio de este año, lo que supone un incremento del 35,9% respecto al mismo periodo del 2005, según revelan los últimos datos publicados por el Banco de España.

Solo en el mes de junio, los envíos de dinero de los trabajadores extranjeros se situaron en 525 millones de euros, lo que representa un incremento del 39,25% frente a junio del año pasado.

Los datos de la autoridad monetaria ponen de manifiesto la entrada creciente de inmigrantes en España, ya que desde el año 2002 las estadísticas del Banco de España reflejan que las remesas de inmigrantes han ido creciendo de forma paulatina desde entonces. Así, las remesas de inmigrantes en el 2002 representaron 2.844 millones de euros, cifra que ascendió en el 2003 a 3.475 millones, en el 2004 a 4.189 millones y en el 2005 a 4.614 millones.

Por su parte, el dinero procedente de los ciudadanos españoles que viven en el extranjero aumentó un 12% en los seis primeros meses del año, hasta alcanzar los 2.241 millones de euros.