La dirección de Renfe comunicó ayer al comité de empresa un nuevo recorte de plantilla hasta el 2004 que afectará a 1.500 empleados, el 4,8% del personal de la compañía ferroviaria. Tanto la empresa como los sindicatos indicaron que se trata del séptimo expediente de regulación y que se inscribe dentro del plan de reestructuración iniciado en 1991 en Renfe, por el que ya se ha pasado de 48.000 a 31.109 trabajadores.

Para el 2003 y el 2004, el plan de recorte afectará principalmente a los empleados que tengan 58 años y que posean una antigüedad mínima en la empresa de 35 años. Entre las prejubilaciones y bajas incentivadas (unas 30), este año abandonarán la empresa 700 empleados, a los que se sumarán 800 en el 2004. La regulación se centrará en los puestos de ayudante de maquinista y de interventor en trenes de mercancías.