Los responsables de ATA, Lorenzo Amor; de UPTA, Sebastián Reyna; y PIMEC, Josep González, coinciden en que el crecimiento de sus organizaciones obedece al abandono de la CEOE y de los sindicatos de los problemas de los pequeños empresarios.

"En este país se confunde un empresario con la persona que dirige un consejo de administración, tiene un gran coche, un buen traje y un perfume caro pero no arriesga nada", explica Amor. Dice que el autónomo ha sido el gran olvidado de las patronales y por eso afirma que ahora "la CEOE no representa ni la voluntad ni el sentir del pequeño emprendedor, que constituye el 97% del tejido empresarial".

MAS PRESENCIA Reyna entiende también que la posición de la CEOE es la de la gran patronal y que durante años el autónomo ha estado abandonado por todos, incluso por los sindicatos. Solo UGT se dio cuenta hace nueve años del problema e impulsó la UPTA.

En su opinión, la CEOE intentará tener mayor presencia a través de Ceat: "Es posible que su filial de la pequeña y mediana empresa, CEPYME, le trasvase parte de sus ficheros de personas físicas para que obtenga más representatividad".

González --que ha firmado una alianza con ATA--, piensa que el estatuto abre "una puerta de esperanza para evitar el monopolio de la CEOE". Coincide en que la CEOE solo apoya a las grandes empresas y que "CEPYME es solo una marca, una imagen supeditada a la CEOE; por eso es normal que los pequeños empresarios se asocien en organizaciones como la nuestra o como las que existen en Baleares o Valencia, con las que hemos creado un foro unido".