Seis de cada diez franceses están a favor de que se supriman las monedas de 1 y 2 céntimos de euro, como en Finlandia y Holanda, aunque los precios se redondeen al alza, según una encuesta divulgada ayer.

El 59% de los sondeados desean que desaparezcan de la circulación esas monedas, que consideran inútiles y molestas, pese a que el 71% de ellos dan por hecho que se redondearían al alza los precios.