La riqueza financiera neta de las familias residentes en España, que se mide con la diferencia entre los activos financieros que poseen y los préstamos que tienen concedidos, se situó en el primer trimestre del año en 844.334 millones de euros, el 4,85 % más que en mismo periodo de 2010. Según los datos publicados hoy por el Banco de España, la riqueza financiera neta de las familias aumentó en términos brutos en 39.027 millones de euros. Si se comparan las cifras con el trimestre anterior, el aumento de la riqueza financiera neta familiar es del 3,03 %, ya que en el último trimestre de 2010 alcanzó los 819.503 millones de euros. Por su parte, los activos financieros de los hogares españoles -dinero en efectivo, acciones, depósitos y valores de renta fija- sumaban 1,789 billones de euros al finalizar el primer trimestre del año, por encima de los 1,751 billones que tenían en el mismo periodo de 2010. Los pasivos financieros de las familias -los préstamos a corto y a largo plazo y otras cuentas pendientes de pago, como créditos comerciales y anticipos- alcanzaron los 945.573 millones entre enero y marzo, ligeramente por debajo de los 946.382 millones que sumaban un año antes. Los préstamos tanto a corto como a largo plazo continuaron recortándose un trimestre más, en reflejo de la crisis económica que atraviesa España, que retrae a los clientes a la hora de pedir un crédito y también hace que las entidades sean más reticentes al concederlos.