Alfredo Pérez Rubalcaba, puso ayer letra a la nueva estrategia social del Gobierno, que pasa por evitar la confrontación con los agentes sociales y abrir una etapa de acuerdos. En la inauguración del 13º congreso del Instituto de Empresa Familiar (IEF) les pidió que "participen" en el diálogo social y que "vuelvan a trabajar con los sindicatos", para que pueda haber un pacto sobre la negociación colectiva y la aplicación de la reforma laboral, incluido el descuelgue de los convenios colectivos, para que el ajuste por la crisis no recaiga solo sobre el empleo.

Es de destacar que el primer acto público del nuevo hombre fuerte del Gobierno haya sido en el foro del influyente lobi empresarial como el IEF. A sus miembros le dio el tono de la agenda para el año y medio que queda de legislatura, una combinación de austeridad, reformas y cohesión social.

Para equilibrar el mensaje sobre quién y cómo se debe contribuir a la salida de la crisis, Rubalcaba pidió al empresariado que "aliente la reforma del sistema financiero" y que "transmita confianza de país". Esto último no supone, dijo, "esconder" que haya problemas, sino "que les digan a los españoles algo que creo que forma parte de la esencia misma de su empresa: confianza de que vamos a salir adelante".

LIMAR ASPEREZAS Tras reconocer que las relaciones con los sindicatos "no atraviesan el mejor momento", el vicepresidente primero consideró que aún hay margen para limar asperezas durante la aplicación de la ley de reforma laboral. Y, sobre todo, clamó por un acuerdo sobre la reforma de las pensiones, como anteriormente había hecho el presidente saliente del IEF, Simón Pedro Barceló.

A pesar de todos estos grandes llamamientos, la comisión del pacto de Toledo todavía se encuentra lejos de debatir los temas más polémicos, como la ampliación de la edad de jubilación a los 67 años o a 20 años el cómputo mínimo de vida laboral para tener derecho a recibir una prestación.

Mañana la comisión estudiará la posibilidad de adoptar un aspecto del llamado modelo sueco de pensiones, que consiste en elevar el nivel de información a los trabajadores sobre su vida laboral para que sepan en cada momento qué tipo de prestación tendrán cuando se jubilen y qué pueden hacer para aumentarla.

MODELO SUECO En Suecia recibe el nombre de sobre verde , un sistema que algunos consideran decisivo para la transparencia del sistema. Se trata de una cuenta en la que cada trabajador va haciendo su aportación en forma de cotización por la que después recibirá una pensión.

Todas estas aportaciones tienen una determinada rentabilidad que va en función de factores demográficos (más o menos población), de PIB (ligados a la marcha de la economía) o salarial. Por ello, en algunos sectores se tacha a este sistema de insolidario, ya que, además, no hay aportaciones del Estado.

Otro tema a debate por parte de la comisión será el de la gestión del sistema de pensiones. Existe una vieja propuesta del actual secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, para la creación de una agencia que unifique la tesorería y el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). La comisión se encuentra a la espera de la comparecencia del nuevo ministro de Trabajo, con el fin de conocer su programa.