El Banc Sabadell ha puesto en marcha el proceso de venta de Solvia Desarrollos Inmobiliarios (SDIN), la empresa tenedora de suelos del banco y que lleva a cabo promociones inmobiliarias en España. La entidad ha puesto este viernes el libro de venta en manos de los posibles compradores entre los que se encuentran los fondos inmobiliarios internacionales como Cerberus, Blackstone, Värde, y Oaktree, entre otros, según han confirmado fuentes del mercado inmobiliario. El proceso, sobre el que el propio banco no ha querido realizar ningún comentario, se alargará previsiblemente hasta el mes de abril. Tiempo necesario para que los compradores manifiesten su interés y lleven al cabo el proceso de análisis de la sociedad a la venta.

La proceso de venta de la sociedad de desarrollos se inicia apenas un mes después de que el banco que presiden Josep Oliu, cerrara la venta del 80% de su 'servicer' --gestor inmobiliario-- a Lindorff Holding Spain, sociedad peteneciente al fondo sueco Intrum, que finalmente se ha adelantado a los fondos Cerberus y Centricus, que también pujaban por la filial inmobiliaria. En esa operación, Solvia fue valorada en 300 millones de euros. El precio correspondió al 80% de la participación de la sociedad, que se podrá incrementarse en un importe máximo de 40 millones de euros si se cumplen las condiciones previstas, relacionadas con la evolución de determinadas líneas de negocio de Solvia. El cierre de la operación se prevé para el segundo semestre del 2019.

PERIODO DE MADUREZ

SDIN se encuentra en el periodo de madurez para su venta, han comentado fuentes conocedoras de la operación. La firma cuenta con una reserva de más de 300 suelos urbanizables que está valorada en unos 1.200 millones de euros y tiene en marcha cerca de 130 promociones inmobiliarias en diferentes zonas de España, con más de 5.000 viviendas en marcha. El tamaño de la cartera de Solvia, que está dirigida por Francisco Pérez, la coloca en la segunda liga dentro del sector, justo después de las promotoras inmobiliarias cotizadas, capitaneadas por Metrovacesa, Neinor, Aedas o Vía Célere, solo Sareb tiene más activos.

La venta forma parte del proceso de desinversión en activos no estratégicos emprendido por el banco a lo largo de los últimos dos años a raíz de las exigencias de solvencia impuestas por el Banco Central Europeo (BCE). En ese proceso se incluye la venta por 630 millones de euros de su plataforma hotelera HI Partners al fondo Blackstone a finales del 2017. Además, el banco llevó a cabo el traspaso de varias carteras que tenía en venta integradas por activos problemáticos, con un valor aproximado de 12.500 millones de euros, de las cuales dos fueron adquiridas por Cerberus (con un valor de 9.100 millones) y otra por Axactor (900 millones). La última desinversión del banco fue la del 'servicer' en diciembre pasado.

LOS ACTIVOS ADJUDICADOS DEL LADRILLO

Desde que el sector inmobiliario comenzó su recuperación en el 2014, el Sabadell ha estado analizando diferentes opciones para desprenderse de su inmobiliaria, engordada con los activos del ladrillo que tuvo que adjudicarse como consecuencia de la crisis. Entre las opciones se llegó a barajar la salida al bolsa, aunque finalmente la alternativa que se han impuesto la venta por separado de las dos áreas de actividad que e incluían en Solvia (el 'servicer', por un lado, y la promotora, por otro). El objetivo es el de maximizar el precio de la operación. De hecho, el bloque Solvia llegó a entrar en el paquete de negociación de la cartera de activos problemáticos. Aunque se desgajó de esa cartera a última hora, por una custión de precio, señalaron fuentes financieras en su momento.