La vicepresidenta Elena Salgado ha asegurado hoy que está orgullosa de haber servido a España y a sus ciudadanos "en un momento especialmente crítico", aunque reconoció que ni ella ni ningún miembro del Gobierno puede estar satisfecho "mientras exista un número tan importante de personas desempleadas".

En la última sesión de control de la legislatura, la vicepresidenta también ha dicho sentirse orgullosa de haber adoptado "todas las medidas que pudieran paliar los efectos de la crisis y propiciaran la recuperación".

Salgado ha afirmado que esa era su respuesta desde un punto de vista personal, pero que como representante política de lo que menos orgullosa se siente es de la oposición. Ha sido en respuesta a una pregunta de la portavoz parlamentaria del grupo popular, Soraya Sáenz de Santamaría, que le ha acusado de llevar a cabo una política económica improvisada, descoordinada y sin criterio.

"Su cartera cargará con el peso de todas las reformas que ha dejado de hacer. No hará un traspaso de poderes, sino de deberes", ha dicho la portavoz del PP, que ha recriminado al Gobierno que su falta de acción dejará una pesada carga a las generaciones futuras.