El Grupo Santander ganó 2.611 millones de euros (434.434 millones de pesetas) el año pasado, un 16,2% más que en el ejercicio anterior. Emilio Botín, el presidente del primer banco español, satisfecho por romper los récords que él mismo marca, dio a conocer ayer los resultados. En la última junta de accionistas había prometido que los beneficios rebasarían los 2.500 millones.

El banquero cántabro cargó de nuevo contra "las grandes fusiones transfronterizas entre iguales, porque no crean valor para el accionista" y destacó las reformas "muy, muy positivas" que se han hecho en la economía española: "Esa debería ser la línea a seguir en el futuro". Sin embargo, a la hora de opinar sobre los programas económicos del PP y del PSOE prefirió no opinar.

CUARTO TRIMESTRE En la cuenta de resultados, la depreciación de las divisas aún impactó un 15% en el margen de intermediación, que descendió hasta los 7.958 millones de euros, en especial por el retroceso del dólar. Botín destacó que el Santander ha amortizado todo el fondo de comercio de la compra del banco brasileño Banespa, mediante 1.719 millones procedentes de resultados extraordinarios. El cuarto trimestre fue el mejor del año, ya que el resultado supera en un 6,8% el del tercer trimestre y un 29,6% el del 2002.

Sobre el aumento de actividad y la cuota de mercado, el cántabro destacó que "si el Santander está ganando cuota a la banca, Banesto lo está haciendo frente a las cajas". Asimismo, Botín negó que vayan a producirse cambios en la cúpula. El financiero, que cumplirá 70 años, no piensa en jubilarse, porque "en el SCH no hay fecha para que se jubilen ni presidente ni consejeros".