Los planes de ayuda a los compradores de coches siguen dando buenas noticias para las fábricas españolas. La última muestra es el acuerdo alcanzado en Seat para reducir en cuatro días las jornadas de inactividad previstas en el expediente de regulación de empleo (ERE). La causa es un pedido extra de 2.000 coches del modelo Ibiza en el Reino Unido y Grecia, países que han prorrogado sus subvenciones de 2.172 y 3.200 euros por renovar el vehículo.

El presidente del comité de empresa, Matías Carnero, espera que "cunda el ejemplo" y que se mantengan los incentivos para cambiar de coche en un momento en el que el Gobierno central estudia si alarga el plan 2000E. También el presidente de Renault España, Jean-Pierre Laurent, avisó de que, si no se prolonga el 2000E, las ventas caerán el 20% en el 2010, frente a la posibilidad de subir un 10% si se mantiene la ayuda.

Mientras, el presidente de Seat, James Muir, ha decidido dejar de producir el modelo Córdoba y el Ibiza viejo, lo que postergará la expansión en países emergentes.