La tensión política en Cataluña está incidiendo en varios indicadores económicos vinculados al turismo pero el sector estima que se va a empezar a notar en el empleo. Al finalizar el primer trimestre del 2018 se sumarán seis meses consecutivos de caídas de ingresos por encima del 10,0%, por lo que los empresarios turísticos descuentan la posibilidad de tener que empezar a ajustar sus plantillas ante el descenso en la demanda.

Exceltur, consorcio que agrupa a la mayoría de las empresas hoteleras, de alquiler de coche, transportes y ocio vinculadas al turismo, ha pulsado la opinión del sector y calcula que los hoteles esperan una reducción media del 8,2% de su personal en los primeros tres meses del año respecto al mismo periodo del 2017. En las empresas de alquiler de coches se prevé una bajada de plantillas del 5,0%.

Exceltur ha estudiado la evolución del turismo en los últimos meses, sobre todos tras el 1 de octubre hasta finales de noviembre, así como las perspectivas para diciembre, aunque ya se han constatado la caída de reservas para este puente en la ciudad de Barcelona, la más afectada por la crisis. Dadas las fechas, la bajada de ingresos para diciembre proviene principalmente del mayor descenso de la demanda española, mientras en octubre y noviembre la caída vino por la demanda extranjera.

Menos demanda

Concretamente, los empresarios hoteleros esperan descensos en los ingresos procedentes de la demanda nacional del 21,5%, por el 12,9% esperado para la demanda extranjera.

Entre el 1 de octubre y el 1 de diciembre, en el conjunto de Catalunya se redujeron los ingresos por habitación disponible un 2,8%. La caída de la actividad turística, según Exceltur, se ha concentrado, casi exclusivamente, en la ciudad de Barcelona y su área metropolitana que representan cerca del 40% del total de la demanda hotelera del conjunto de Catalunya.

El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) cifra la caída de los ingresos por habitación disponible en torno al 11,2% en octubre, mientras el aumento esperado para ese mes era del 4,7%. Con ello el impacto del 1-O y los acontecimientos posteriores se cuantifica en una caída de 15,9 puntos en la facturación de los hoteles de la ciudad.

En octubre, los ingresos por alojamiento en hoteles se han reducido por el retraimiento de la demanda extranjera (4,1% en pernoctaciones en Barcelona, consecuente con la caída de demanda extranjera del 4,7% en toda Catalunya). Los hoteles de cuatro estrellas son los más afectados con un descenso de demanda extranjera del 13,7% y en los hoteles de cinco estrellas, del 10,5%. La demanda española apenas cayó en términos de pernoctaciones en hoteles (0,3%).