Los sindicatos han propuesto al Gobierno un aumento sustancial de los incentivos que existen en la actualidad para impulsar el retraso voluntario de la jubilación. En lugar de dar un 2% o 3% adicional de pensión por cada año de demora más allá de los 65 años, CCOO y UGT plantean premiar a los que se jubilen más tarde con una horquilla de incremento entre el 3% y el 5%, en función de los años acumulados de cotización.

Con esta medida, pretenden convencer al Ejecutivo de que es posible retrasar la edad de jubilación hasta los 67 años pero de forma voluntaria y no por ley. Un trabajador con una vida laboral larga podría recibir una mejora del 10% en su pensión si se jubila a los 67 años.

Los actuales incentivos tienen un efecto modesto al haber favorecido que el 9% de los que se jubilan lo hagan con más de 65 años. Entre enero y agosto de este año, 11.084 personas recibieron el complemento y empezaron a cobrar una pensión de unos 930 euros de media.

AUTONOMOS La alternativa sindical también incluye un incremento de las bases máximas y mínimas de cotización con el fin de incrementar las aportaciones, que darán derecho posteriormente a mejores pensiones, según explicó Carlos Bravo, secretario de Seguridad Social de CCOO. Además, las centrales proponen mejorar las prestaciones de los regímenes especiales de los autónomos, las empleadas de hogar y de los agricultores.

Los sindicatos reiteraron ayer su rechazo al planteamiento del Gobierno de rebajar de 41 años a 39 la exigencia de cotización para permitir el retiro a los 65 años con el 100% de la pensión. El líder de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, recordó que la propuesta no se ha formalizado en la mesa de negociación. El Ejecutivo sugirió la posibilidad de bajar su propuesta de 41 a 39 años de forma verbal, según fuentes de la negociación.

Algunas fuentes apuntaron la posibilidad de que se reanude la negociación este fin de semana en un clima marcado por el pesimismo. Sin embargo, ni los líderes de los sindicatos ni el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba tiran la toalla y coinciden en que el acuerdo es posible.

El Gobierno también ha planteado eliminar la jubilación especial a los 64 años y el retiro parcial, fórmula utilizada por gran número de empresas para rejuvenecer sus plantillas.