Las maratonianas reuniones de negociación sobre la reforma de las pensiones entre el Gobierno y los sindicatos empiezan a dar algunos frutos. Entre los puntos de acercamiento de las posiciones se encuentra la propuesta alternativa de CCOO y UGT, que incluye el retraso de la edad mínima para jubilarse desde los 61 años vigente ahora a los 63. Con este planteamiento en estudio por parte de los sindicatos, se conseguiría el objetivo del Ejecutivo de acelerar el incremento de la edad real a la que dejan de trabajar los españoles.

CCOO y UGT pretenden con esta alternativa convencer al Gobierno para que abandone su proyecto de fijar la edad legal de jubilación en los 67 años, una medida que significaría la convocatoria de una nueva huelga general. La propuesta se completa con la posibilidad de jubilarse más allá de los 65 años de forma voluntaria y recibiendo incentivos económico en forma de incrementos de la pensión. En conjunto, el planteamiento sindical supondría mover la actual franja de jubilación de 61 años a 65 a una nueva entre los 63 y los 67 años, según indicaron fuentes de la negociación.

MEDIDA GRADUAL Esta medida, que previsiblemente se aplicaría de forma gradual y manteniendo los derechos de los trabajadores próximos al retiro, hubiera afectado al 9% de los jubilados del 2009, con un total de 24.865 personas que dejaron de trabajar con 61 y 62 años. A esta cifra hay que añadir 18.927 pensionistas con 60 años o menos que trabajaron en empleos penosos o cotizaron como mutualistas antes del año 1967.

La alternativa sindical no ha sido formalizada todavía en la mesa de negociación a la espera de que los intensos contactos en marcha pasen de una fase técnica a otra más política. Los sindicatos admiten que el planteamiento obligará a las cúpulas a emplearse a fondo para explicar dentro de las organizaciones los beneficios de la medida.

El ambicioso objetivo del Ejecutivo de ahorro en el gasto de la Seguridad Social (14.000 millones hasta la década del 2020 y 36.000 hasta el 2040) dificulta la aceptación de la alternativa sindical por parte del Ministerio de Economía, según indicaron las mismas fuentes. Las centrales sindicales trabajan en sus propios estudios económicos para contrarrestar los cálculos oficiales, que se basan en un crecimiento económico medio anual del 1,5% que califican de "muy conservador".

AHORRO El líder de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, recordó ayer que si el Gobierno cumple con la recomendación del Pacto de Toledo de pagar con impuestos y no con cotizaciones los complementos asistenciales para las pensiones mínimas se ahorraría 7.000 millones.

CCOO y UGT califican de insuficiente la flexibilidad que ofrece José Luis Rodríguez Zapatero para permitir jubilaciones a los 65 años, una posibilidad reservada a los que hayan cotizado 41 años. El secretario de acción sindical de UGT, Toni Ferrer, considera "una barbaridad" esta propuesta porque dejaría fuera a muchos empleados.

Otro de los puntos considerados como lesivos por los sindicatos es el de la limitación a dos años del periodo de cotización que asume el Seguro en el caso de los trabajadores que tienen lagunas en la última fase de su historial laboral.