El primer ministro portugués, José Sócrates, salió hoy en defensa de la economía lusa y pronosticó que superará la crisis sin ayuda y que el rescate de Irlanda frenará la especulación financiera "sin sentido" que padece. "Portugal no tiene ningún problema en su sistema financiero", subrayó el dirigente socialista en declaraciones a los periodistas en las que insistió que Lisboa no necesita recurrir a la ayuda externa y la situación de su economía está en la media de la UE. Sócrates manifestó además su confianza en que la ayuda europea a Dublín "calme los mercados y pare la especulación, que no tiene ningún sentido". Pero la presión sobre la deuda soberana lusa no dejaba de subir en los mercados, donde la prima que la penaliza superaba hoy los 420 puntos base en el caso del bono a diez años, que sirve de referencia. Con todo, el primer ministro insistió en que no tiene "ninguna duda" de que la confianza regresará a los mercados y en que "Portugal no precisa de ayuda de nadie y va a resolver sus problemas con sus propias decisiones". El país ibérico sufría un "un nítido efecto de contagio" de la situación irlandesa, admitió, pero no hay "ninguna relación" entre la situación de ambas naciones. El sistema financiero de Portugal, recordó, fue de los que menos sufrió por la crisis de los dos últimos años, no había burbuja inmobiliaria y su situación presupuestaria no es comparable a la irlandesa. Este año el déficit público cerrará en el 7,3% (dos puntos menos que en 2009) un nivel inferior al de Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Japón además de Grécia e Irlanda, remarcó Sócrates. La deuda pública, añadió en su defensa de las cifras macroeconómicas lusas, está en línea con la media de la UE y el presupuesto de 2011 reducirá el déficit al 4,6%, por debajo de esa media.