El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, aseguró hoy que las previsiones macroeconómicas presentadas el pasado viernes por el Gobierno "son las definitivas" siempre y cuando el precio del barril del petróleo no supere los 140 dólares.

"En este momento las previsiones macroeconómicas del Gobierno son las definitivas", dijo Solbes en una entrevista en la Cadena Ser y puntualizó que si el precio del petróleo supera los 140 dólares por barril, las estimaciones del Ejecutivo, que se han se han realizado con el crudo a 133 dólares, podían corregirse nuevamente.

La crisis económica ha obligado al Gobierno a modificar sus previsiones en varias ocasiones y, según el último cuadro macroeconómico aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros, la economía española crecerá el 1,6 por ciento este año y el 1 por ciento en 2009, con unas tasas de paro del 10,4 y del 12,5 por ciento, respectivamente.

Solbes afirmó hoy que le gustaría decir que el Gobierno no trabaja con las previsiones de una posible recesión, aunque sí lo hace con un crecimiento de la economía "muy cercano a cero" para los próximos trimestres.

El ministro auguró que la economía española tendrá un "ligero" crecimiento en el segundo trimestre, y "algo mayor" en el tercero aunque, dijo, en el último de 2008 y el primero de 2009 la actividad todavía será baja.

Recordó que una alza en el precio del petróleo en España se traslada "de forma inmediata" al precio de los demás productos, por lo que auguró un posible repunte de la tasa de inflación en los meses de julio y agosto.

Solbes destacó la importancia de que esta subida de precios no se traslade a los salarios para evitar "una espiral que tenga efectos muy negativos a largo plazo" e insistió en la necesidad de que los ciudadanos comprendan que "es mejor tener más empleo que subir los salarios". También se refirió al Plan de Ahorro presentado ayer por el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y recordó que la idea de consumir menos energía se ha tenido "bastante descuidada" hasta la pasada legislatura.

"Al plan hay que darle la bienvenida", afirmó, aunque reconoció que todavía no ha analizado si se han incluido todas las alternativas de ahorro con las que cuentan otros países.

Explicó que para reducir la fuerte dependencia del petróleo que tiene España hay dos opciones: buscar energías alternativas, algo que exige tiempo, investigación y un cambio de modelo, o consumir menos energía "en la medida de lo posible".