La crisis bursátil iniciada en el 2000 ha pasado factura a la mayor parte de las compañías que han salido a bolsa. De las 19 ofertas públicas de venta o

(OPV) presentadas en estos tres años, sólo cinco han sido rentables para los accionistas: Gamesa, Iberia, Inditex, Puleva Biotech y Enagás.

Los inversores más beneficiados son los que acudieron a la colocación de Gamesa, que salió a bolsa el 31 de octubre de 2000, a 12,60 euros y cerró el pasado viernes a 19,20, lo que supone una plusvalía del 52,38%. Su cotización sólo cayó por debajo de los 12,60 en dos jornadas posteriores a los atentados del 11-S.

Iberia también registró una gran revalorización. Los accionistas pagaron 1,19 euros por título y en la actualidad se intercambian por 1,69 euros, lo que supone una subida del 42% por ciento desde el 3 de abril de 2001.

Inditex, propietaria de Zara, Bershka, Massimo Dutti o Stradivarius, ha ganado un 35% desde mayo de 2001. Mientras que Enagás, participada por Gas Natural, se ha revalorizado poco más de un 13% desde el 26 de junio de 2002.

DESCALABRO TECNOLOGICO

Las empresas con más descalabros fueron las tecnológicas. Sólo Puleva Biotech, que comenzó a cotizar a finales de 2001, se desmarcó de sus competidoras. Los inversores han obtenido una rentabilidad superior al 33%. Otras 14 empresas que apelaron al mercado cerraron el viernes por debajo de su salida.

La mala racha de los mercados bursátiles en los últimos tres años también se ha cebado en las compañías de comunicación, ya que dos de sus representantes en la bolsa española, Prisa y Recoletos, acumulan pérdidas desde que salieron a bolsa, del 61,77% y del 54,58%, respectivamente.

Otras empresas que han cerrado a un precio inferior al de su salida a bolsa son Logista, EADS, Telefónica Móviles, Ence, Bami y los bancos BBVA, SCH y Banesto.